Lista de la compra saludable: Guía rápida

En verano es habitual optar por comidas más ligeras, frescas y rápidas. El calor tiende a reducir nuestro apetito, pero incluso cuando esto ocurre, nuestro cuerpo sigue necesitando energía, proteínas de calidad, fibra y grasas saludables.
Elegir bien al hacer la compra es la mitad de la batalla para garantizar una dieta saludable. Y créeme, comer sano no es un «monstruo de siete cabezas»: el secreto está en combinar alimentos sencillos, que puedes encontrar fácilmente en cualquier supermercado, con algunos productos prácticos y nutricionalmente interesantes que te faciliten el día a día.
Lo que no puede faltar en tu lista de la compra saludable
Hidratos
Una de las primeras cosas a tener en cuenta es el tipo de hidratos de carbono que consumes. Aunque mucha gente piensa que hay que eliminar el pan, lo cierto es que no todos los panes son iguales. Hay que evitar el pan blanco y el pan con azúcar oculto, pero existen alternativas mucho más equilibradas. El pan de cereales LEV, por ejemplo, es rico en fibra y proteínas, con un bajo contenido en hidratos de carbono, lo que lo hace ideal para desayunos o meriendas que realmente sacian. Otros hidratos de carbono complejos, como la avena, el arroz integral o el boniato, también deberían estar en tu lista de la compra, ya que aportan energía más lentamente.
Productos lácteos
En cuanto a los productos lácteos, opta por los bajos en grasa y los naturales. La leche desnatada y el yogur natural sin azúcar son buenas fuentes de proteínas y calcio. El kéfir también es una excelente opción, ya que además de aportar proteínas y calcio, también tiene probióticos que son beneficiosos para la salud intestinal, facilitando así la digestión.
Proteína
Las proteínas son esenciales. La mejor opción son las proteínas magras, ideales para cocinar a la plancha, hervidas o incluso en ensalada. El pollo, el pavo y el conejo son excelentes fuentes de proteínas bajas en grasa.
Lo mismo ocurre con el pescado y los huevos. La merluza, la dorada, la lubina, el atún natural o el bacalao son opciones magras, ricas en proteínas y ácidos grasos esenciales como el omega-3. Los huevos son muy versátiles y nutritivos, y pueden utilizarse en tortillas, ensaladas o tentempiés rápidos.
Comidas prácticas
Si no tienes mucho tiempo para cocinar, las comidas LEV son una solución práctica y equilibrada: desde pechuga de pollo con setas selvajes hasta bacalao con migas, todas las opciones están diseñadas por nutricionistas y hechas para quienes quieren mantenerse concentrados incluso en los días más ajetreados.
Los wraps son también una solución excelente para almuerzos rápidos, tentempiés o incluso cenas ligeras. Sin embargo, muchos wraps disponibles en el mercado llevan harinas refinadas y azúcares añadidos. Los wraps LEV son una versión sana, vegana y sin lactosa, con un alto contenido en proteínas y fibra. Son ideales con verduras, huevos, pollo o pescado, creando comidas completas en pocos minutos.
Otro truco sencillo y eficaz es apostar por hierbas aromáticas y especias. Perejil, cilantro, albahaca, menta, orégano, jengibre o cúrcuma no sólo realzan el sabor de los platos, sino que también ayudan a reducir la necesidad de sal y salsas industrializadas. El aceite de oliva virgen extra, utilizado con moderación, es también una grasa saludable esencial.
Verduras y hortalizas
Pero una dieta sana no está completa sin verduras y ensaladas. Espinacas, lechugas, rúcula, pepino, pimientos, calabacines y zanahorias deben formar parte de prácticamente todas las comidas. Son ligeras, hidratantes y ricas en fibra y micronutrientes. Las legumbres como los garbanzos, las alubias o las lentejas son otra excelente fuente de proteínas vegetales y pueden utilizarse en ensaladas frías, platos calientes o incluso para untar.
Frutos secos y semillas
Como tentempié o para añadir textura a las comidas, los frutos secos y las semillas son una opción inteligente. Las almendras, las nueces, las semillas de chía o las pipas de girasol aportan grasas buenas, fibra y saciedad. Una pequeña ración al día es suficiente para aprovechar sus beneficios.
Fruta fresca
La fruta fresca no puede faltar en tu cesta de la compra. La sandía, el melón, las fresas y los melocotones son refrescantes (ideales ahora en verano).
Snacks proteicos
¿Prefieres algo más práctico? Las barritas proteicas o los snacks LEV son ideales para mantener la energía sin exceso de azúcar.
Tener la despensa y la nevera llenas de buenos ingredientes es la mejor manera de mantener una dieta sana y constante, incluso en los días más ajetreados.
¿Cómo evitar caer en la tentación al hacer la compra?
En conclusión, incluso con los mejores planes y listas, es fácil desviarse del camino correcto al entrar en el supermercado. Estas pequeñas estrategias marcan la diferencia:
- Haz una lista de la compra saludable (¡y cúmplela!) – Te ayuda a evitar las compras impulsivas y te asegura que sólo te llevas lo imprescindible.
- Ve a comprar después de comer – Nunca vayas al supermercado con hambre. Es más probable que elijas opciones que normalmente evitarías.
- Evita los pasillos de la tentación – Siempre que sea posible, evite las zonas con aperitivos, refrescos y golosinas.
- Ten a mano alternativas saludables – Si sabes que te apetece algo dulce al final del día, ten tentempiés LEV en casa. Podrás satisfacer el antojo sin despeinarte.
Lista de la compra saludable – lo básico
- Pan de cereales Lev
- Avena
- Arroz integral
- Boniato
- Carnes magras (pollo, pavo, conejo)
- Huevos
- Pescado (merluza, lubina, bacalao, atún natural)
- Leche desnatada
- Kéfir o yogures naturales sin azúcar
- Garbanzos
- Alubias
- Lentejas
- Verduras de hoja verde (lechuga, rúcula, espinacas)
- Verduras (pepino, brócoli, pimientos, calabacín)
- Frutas (sandía, melón, fresas, melocotones)
- Almendras y nueces
- Especias y hierbas (perejil, cilantro, cúrcuma, albahaca, orégano, menta, jengibre)
- Semillas de chía y girasol
- Comidas preparadas Lev
- Snacks proteicos