Cortisol: la hormona que puede estar impidiendo que pierdas peso
En los últimos meses, el cortisol ha adquirido protagonismo en las discusiones sobre salud, bienestar y pérdida de peso, especialmente en las redes sociales. En LEV, donde adoptamos un enfoque integrado y personalizado de la pérdida de peso, este tema no podía faltar. Pero, ¿qué es el cortisol y por qué puede estar dificultando tu pérdida de peso?
¿Qué es el cortisol?
El cortisol se conoce comúnmente como la «hormona del estrés». Es una hormona producida por las glándulas suprarrenales, situadas encima de los riñones, y tiene funciones importantes como regular el metabolismo, equilibrar el sistema inmunitario y responder al estrés.
Cortisol y la obesidad
Por lo general, cuando el estrés se vuelve crónico – sea debido a factores emocionales, a la falta de sueño o a una dieta inadecuada – el organismo empieza a producir cortisol de forma desregulada.
Hay que tener en cuenta que tanto los niveles altos como los bajos de cortisol pueden afectar al organismo.
Los niveles elevados de cortisol se asocian con:
- Aumento del apetito, especialmente por alimentos ricos en azúcar y grasa;
- Acumulación de grasa abdominal, una de las más difíciles de eliminar;
- Resistencia a la insulina, que dificulta el control del azúcar en sangre;
- Desregulación del sueño, esencial para el equilibrio hormonal y el control del peso.
Señales de desequilibrio
El cortisol tiene un ritmo natural.
El ritmo circadiano del cortisol muestra picos por la mañana (para ayudarnos a despertar) y un descenso gradual a lo largo del día.
Cuando es alta:
- Hay un aumento de peso;
- Provoca insomnio;
- Provoca ansiedad o irritabilidad;
- Causa fatiga crónica
- Provoca un aumento de la tensión arterial;
- Disminuye la inmunidad.
Cuando es deficitario:
- Provoca cansancio extremo
- Aumenta la caída del cabello
- Pérdida de apetito
- Hipoglucemia (niveles bajos de azúcar en sangre)
- Mareos al ponerse de pie
¿Cómo puede ayudar la alimentación a equilibrar el cortisol?
En LEV creemos que un plan dietético personalizado es un poderoso aliado para controlar el estrés y regular las hormonas. Algunas estrategias son:
- Evitar el ayuno prolongado, que puede aumentar el cortisol;
- Optar por comidas regulares y equilibradas con proteínas magras, grasas saludables y carbohidratos de bajo índice glucémico;
- Reducir el consumo de cafeína y azúcares refinados.
- Incluir alimentos ricos en magnesio, vitamina C y complejo B, nutrientes que ayudan en la respuesta al estrés;
- Dar prioridad a un buen desayuno para alinear el ritmo circadiano y favorecer la producción natural de cortisol por la mañana.
Además, prácticas como una buena higiene del sueño, la meditación, el ejercicio físico moderado y el apoyo emocional son cruciales para el equilibrio hormonal.
Perder peso no depende sólo de las calorías que comemos o gastamos: hay un (complejo) sistema hormonal implicado. El cortisol, cuando está desequilibrado, puede ser un verdadero obstáculo en el camino hacia un peso saludable y sostenible. Combinando ciencia, nutrición personalizada y apoyo continuo, LEV te ayuda a redescubrir tu equilibrio hormonal, físico y emocional.
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