Cómo combatir el estreñimiento
¿Sabías que el estreñimiento afecta a un 20% de la población?
Y si eres mujer, tu riesgo de sufrirlo se duplica. No estás sola ante este problema, pero como sabemos que “mal de muchos, consuelo de tontos”, hoy queremos ofrecerte unos consejos para combatir el estreñimiento.
¿Cómo sé si estoy estreñida?
Lo normal, estadísticamente hablando, es ir a hacer de vientre entre tres veces al día y tres veces a la semana. Como ves, es un rango bastante amplio; si estás dentro de él, relájate. Y si estás fuera, también, no son límites estrictos, y no siempre somos así de regulares y constantes. Comer fuera de casa o cambiar la rutina alimentaria casi siempre tiene un efecto sobre nuestro comportamiento intestinal y, por tanto, afectará a la gravedad del estreñimiento. Y esto se debe a que estamos ante un síntoma, no ante una enfermedad. Así que si la frecuencia es menor de tres deposiciones semanales y existe dificultad para evacuar las heces, siendo estas secas y duras, entonces ya podremos sospechar que estamos estreñidas.
Si, además, presentamos molestias intestinales, calambres, debemos hacer mucho esfuerzo en el baño y aún así tenemos una sensación de evacuación incompleta, más pistas de que estaremos estreñidas.
Como influye la alimentación?
Si no hay anomalías fisiológicas o anatómicas, las cuales deben ser diagnosticadas por un médico, los cambios en la dieta suelen ofrecer mucha mejoría. Esto se debe a que muchos casos de estreñimiento suceden cuando la alimentación es pobre en frutas, verduras o fibra, también por beber poco. En resumen, líquidos y fibra es la receta básica para que las heces estén lubricadas y circulen fácilmente a través del intestino grueso, por lo que incorporar alimentos ricos en ambos ayudará a combatir el estreñimiento. .
Vegetales
De los vegetales que puedes comer, el brócoli, la col, las espinacas, la coliflor, los tomates, la lechuga, la fruta, o los frutos secos son excelentes opciones. Eso sí, hay personas que al comer algunos de ellos pueden notar flatulencias o que tienen una digestión pesada. La “culpa” de esto es su microbiota intestinal, pues una gran parte de estos alimentos no los digerimos nosotros, sino estas bacterias que hospedamos en el interior del intestino; si, por alguna razón, no realizan esta tarea eficientemente, lo mejor es que las reduzcamos o sustituyamos.
Aceite de oliva
El aceite de oliva es un aliño excelente que también mejorará el estreñimiento. Pero eso no significa que debamos incrementar el consumo de grasas pensando que así las heces se deslizarán mejor al estar “oleosas”. Todo lo contrario, reduce en lo posible las grasas saturadas, además de ser nocivas para tu corazón y vasos sanguíneos, tampoco son buenas compañías para tu tracto digestivo. Su digestión es compleja. Tampoco los alimentos dulces son buenos, corren en riesgo de “caramelizar” y eso se traduce en heces más duras cuya evacuación será más difícil.
Líquidos
Y, por supuesto, bebe, bebe mucho agua, muchas infusiones, o come platos líquidos. Ahora que estamos en las estaciones del frío los caldos y las sopas son un complemento hídrico que favorecerá tus digestiones y evacuaciones, además calentarte.
Con estos simples consejos es muy probable que tu estreñimiento mejore. Si no es así, o se cronifica, será necesario contar con el diagnóstico y consejo médico para tratarlo. Por eso te recomendamos que si necesitas ponerle remedio, cuentes con la ayuda de un profesional que te asesore en cuanto a alimentación y posibles laxantes. Como decíamos al principio, el estreñimiento es un síntoma, no una enfermedad, y si enmascaramos un síntoma, estaremos ocultando la existencia de problemas que pueden empeorar.
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