¿Cómo aliviar los síntomas de la menopausia?

La menopausia es una época algo temida por la mayoría de las mujeres, en parte por cierto grado de desconocimiento sobre los cambios que experimentaremos y en parte por no saber cómo reaccionar ante estos cambios una vez los tenemos más o menos claros. Al final, percibimos la menopausia como un periodo en el que vamos sobreviviendo al día como podemos, intentando, más o menos, aliviar nuestras preocupaciones psicológicas y nuestros cambios físicos. No es fácil.
Estas experiencias vitales son más llevaderas cuando tenemos ciertas guías que nos permitan conocer lo que vendrá porque al ser capaces de anticiparnos también sentiremos cierta sensación de estar manteniendo el control. Si, además, disponemos de herramientas para poder abordarlas exitosamente la entrada en la menopausia será mucho más llevadera y agradable.
¿Qué ocurre durante la menopausia?
La menopausia se desencadena a consecuencia de unos cambios hormonales para que la mujer deje de tener la menstruación de manera regular. Más concretamente, está provocada por una disminución de los niveles de estrógenos y progesterona que además de afectar al ciclo menstrual también tiene consecuencias a distintos niveles del organismo.
Es un periodo de duración bastante variable, pues puede durar desde unos meses hasta algunos años, aunque normalmente comienza cerca de los 50 años. Se divide en tres etapas:
Premenopausia
Las menstruaciones son irregulares y se suceden los famosos sofocos, que pueden ir acompañados de picos de ansiedad e incluso episodios de insomnio. Suele ser la que más problemas nos origina porque es precisamente la etapa de transición y en la que experimentamos los cambios más bruscos.
Menopausia
La menstruación está ausente por espacio de un año.
Posmenopausia
Una etapa que, en general, es mucho más tranquila, aunque algunas mujeres siguen experimentando molestias ocasionales por algún tiempo.
Además de la alteración del ciclo menstrual, hay dos cambios más que la mayoría de las mujeres experimentamos. Nuestra piel tiende a volverse más seca y menos elástica, y las analíticas médicas muestran que el riesgo de osteoporosis crece. Esto se debe a que las fibras de colágeno y elastina de la piel se degradan y aumenta la pérdida de firmeza y la aparición de arrugas. Por otro lado, las carencias de calcio y vitamina D son mayores.
Mejoras para incluir en tu alimentación
En esta etapa de nuestra vida, como siempre, la alimentación que seguimos debe tener en cuenta estas nuevas necesidades. Es por este motivo que nos gustaría darte estos consejos para adaptar tu manera de comer.
Hidrátate
Siempre insistimos en la necesidad de beber agua. También ahora porque nos ayuda a eliminar los líquidos que se tienden a retener durante la menopausia.
Encontrar una selección de aguas con características y sabores únicos, saborizadas de manera natural, te motivará a incrementar el consumo. En el Bar de Aguas de Lev disponemos de una gran variedad de aguas de todo el mundo, para que disfrutes mientras te hidratas.
Incluye menos sal
Disminuye el consumo de sal e incrementa el de verduras diuréticas como alcachofas o espárragos. También la piña es una gran aliada para aliviar la retención de líquidos. ¡Te sentirás más ligera!
También puedes apostar por diuréticos de origen natural como el A.R.L de Lev, desarrollado a base de plantas con acción drenan y desintoxicantes.
Valora la necesidad de suplementos para fortalecerte
Los complementos minerales, especialmente ricos en calcio y magnesio, además de tomar el sol, te ayudará a mantener la salud de tus huesos. Si no puedes, existen también suplementos de vitamina D que pueden compensar la falta de sol o introduce en tu alimentación pescados grasos como el atún, bonito, caballa o sardinas. Los lácteos siguen siendo una fuente insustituible para incorporar el calcio, pero no olvides que este mineral, magnesio y vitamina D se necesitan mutuamente. ¡si uno está ausente no verás beneficios!
En Lev hemos desarrollado un complemento alimenticio para combatir los síntomas de la menopausia y facilitar este proceso, Menopose mejora el equilibrio hormonal, regula los cambios de humor, mejora la memoria, fortalece el sistema inmunológico y reduce el cansancio y la fatiga.
No te sofoques
Las isoflavonas de la soja y el lúpulo son fitoestrógenos, sustancias de origen vegetal que mimetizan a los estrógenos que nuestro cuerpo está dejando de producir. Al compensar esta pérdida, ayudan a controlar esos incómodos sofocos. Además, estos compuestos afectan a los niveles de colesterol, lo que proporcionará beneficios a nuestro corazón y arterias. Búscalos en las bebidas de soja, en el tofu o el miso. Si no eres una fan de estos alimentos, recuerda que lentejas, guisantes, judías blancas o garbanzos contienen también isoflavonas, aunque en menor cantidad.
Como ves, son unas pautas muy sencillas de incorporar en tu día a día y estamos seguras de que una vez lo hagas afrontarás esta etapa de una manera mucho más decidida y segura.