¿Perder peso es tu propósito de año nuevo?

Una de las tradiciones más bonitas y populares que trae un nuevo año es la de plantearse lo propósito de año nuevo: deseos que queremos iniciar desde el día uno de enero y que lograrlos nos causará grandes satisfacciones. Hacer ejercicio, perder peso y dejar de fumar son los tres deseos más frecuentes.
Pero hay un problema, y es que año tras año son los más frecuentes. Eso significa algo: que en la mayor parte de las ocasiones son propósitos que se quedan como simples deseos y terminamos por aparcarlos hasta el siguiente año.
Es una pena porque son tres proyectos de lo más saludables y, ¿sabes qué? ¡También más sencillos de lograr de lo que piensas? La clave está en generar hábitos.
3 días es una motivación, 3 semanas es un hábito y a los 3 meses se obtienen resultados
Esta frase es de la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física y también se escucha bastante en los gimnasios. Explica de manera muy sencilla el salto que debe dar nuestra mente para adoptar una nueva rutina. Al principio, nos sentimos muy eufóricos y con energía; empezamos así a poner en marcha nuestro propósito. Sin embargo, muy pronto surgen las excusas: “no tengo tanto tiempo como creía”, “esto cuesta más de lo que creía”, “no sé si merecerá la pena tanto esfuerzo” para los resultados que habrá”.
Son pensamientos de lo más normales y por eso sería bueno anticiparnos a ellos. Eso sucede en esas semanas en las que vamos adquiriendo nuevos hábitos con los que lograr nuestro objetivo de perder peso.
Como ves, es un proceso donde la psicología juega un papel muy importante, por eso el éxito de estos propósitos de año nuevo están muy vinculados a que tengas un acompañamiento profesional. Por cierto, ¿no hemos dicho que somos seres sociales? Este acompañamiento nos ayuda también a sentirnos parte de un propósito compartido, lo que nos ayudará a reforzar todavía más nuestra buena actitud y adquirir estos nuevos hábitos.
Y así estaremos ya en el camino hacia los resultados.
Los mejores consejos de los profesionales de Lev para que logres el propósito de perder peso
Te invitamos a concertar una cita en tu centro Lev más cercano y así compartir juntos tu objetivo hacia resultados visibles. Pero también queremos ayudarte a que vayas incorporando nuevas rutinas en tu día a día que te ayudarán a adoptar unos nuevos hábitos sin casi darte cuenta. Lo confesamos: queremos estar a tu lado en todo momento y ayudarte. Así que aquí te van unos consejos que estamos seguros de que te serán de lo más útiles:
Márcate y apunta un objetivo realista a corto plazo
Seguro que tienes un pantalón favorito que ya no te pones porque no te vale, u otra prenda de ropa. O quizá notas que te cuesta más que antes atarte los zapatos. Ponte como propósito rebajar una talla de ropa para estar más cerca de volver a reutilizar esta ropa favorita o ganar más flexibilidad. Puede parecer un objetivo sencillo, pero precisamente por eso será sencillo que lo logres y veas resultados muy pronto. Luego, ya vendrán nuevos retos que también conseguirás. La satisfacción y alegría de lograrlos te estimularán a seguir.
No pases hambre
Por el contrario, no hay nada peor que empezar una rutina sintiendo emociones negativas, y el hambre es una de las peores porque nos pone de mal humor y nos genera ansiedad. Desde Lev estamos convencidos que puedes comer de todo y de lo que te gusta y adelgazar. ¿Conoces nuestra gama de snacks? Palmeras, de chocolate, croissants, galletas e, incluso, ¡ganchitos! Son productos concebidos para que puedas comer entre horas sin remordimientos porque te saciarán a la vez que te ayudarán a perder peso.
Enriquece tus comidas
La monotonía alimentaria es uno de los grandes problemas de nuestra sociedad moderna: comemos muy poco variado y eso está vinculado a un gran número de problemas de salud. No deja de ser algo irónico porque nunca en la historia de la humanidad hemos tenido más fácil acceder a todos los alimentos que deseemos. Una manera muy sencilla de solucionarlo es a través del color. Si enriqueces tus platos favoritos con elementos de color gracias a las verduras y frutas verás cómo rápidamente empiezas a lograr objetivos y resultados.
¿Qué tal el vívido naranja de una sopa de pescado? Podemos seguir con una pechuga de pollo a la plancha y guarnición de setas. De postre, un capricho, unas natillas de vainilla con ralladura de chocolate negro ligeramente amargo por encima. ¿Quién dijo culpa y aburrimiento? Comidas coloridas, ricas, nutritivas y con las que poco a poco, sin darte cuenta, habrás convertido tu propósito de año nuevo de adelgazar en un resultado.
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